Un trabajo aparentemente sencillo de rotulación se convirtió en una pequeña pesadilla. Se debían sustituir tres rótulos, dos de ellos en sendos ventanales y el tercero sobre chapa. Al ir a quitar los dos de la ventana los vinilos estaban tan quemados por el sol que literalmente se rompían en cientos de pedacitos súper pegajosos. Terminamos con toda la ropa y zapatos repletos de restos de vinilo. Suponemos que al ser un local totalmente expuesto al sol más los muchos años que llevaban colocados dificultó el poder arrancarlos. Además, no sabemos con qué tipo de vinilo se fabricaron los tres rótulos. Incluso el rótulo superior, pegado en chapa fue literalmente imposible de arrancar, a parte había instrucciones de no cambiar la chapa ni retirarla para pulir en nuestra empresa. El vinilo estaba literalmente fundido sobre la chapa. Se limpió y pegó en nuevo vinilo directamente sobre él. Los nuevos vinilos son poliméricos y laminados para ofrecer una mayor durabilidad. Hay que tener en cuenta que la empresa está situado a escasa distancia del mar y es otro factor negativo en cuanto a la durabilidad de ciertos vinilos adhesivos. Os dejamos algunas imágenes de esta "aventura".
Quitando el vinilo en una de las dos cristaleras. Ya puede verse qué mal se rompe el vinilo al ir retirándolo.
Cientos de pedacitos de vinilo pegándose en la ropa, manos y los zapatos!
Una de las vidrieras limpias y lista para acoger el nuevo vinilo.
Una vez limpio el cristal, pegar el nuevo vinilo es coser y cantar.
Y listo. ¿te has fijado en los zapatos?
Este es el rótulo superior, el antiguo. Ya que no hay manera de quitarlo se limpió a cociencia quitando cualquier suciedad o vinilo despegado.
Hay que trabajar con mucho cuidado y precaución ya que la altura es considerable. Abstenerse gente con miedo a las alturas :)
Hay que cuidar todos los detalles. El dobladillo del vinilo queda totalmente ajustado a la forma de la chapa.
Y trabajo terminado. Una de las "ventajas" de la rotulación es que nunca dos trabajos son iguales. Siempre hay que improvisar, tener en cuenta dónde va a ir colocado, encontrar los mejores materiales...En fin, uno de los pocos trabajos en que nunca vas a quejarte de la rutina diaria!