Cuando se dispone de un escaparate pequeño, aprovechar el espacio visual es esencial para captar la atención del cliente y destacar productos rebajados. Los vinilos decorativos se convierten en una herramienta eficaz para reforzar campañas de descuento sin necesidad de ocupar espacio físico adicional. En primer lugar, es importante elegir un diseño que no recargue el cristal: opta por formas simples como círculos, flechas o etiquetas de oferta que rodeen el producto sin cubrirlo completamente. La elección del color también es crucial. Tonos brillantes como rojo, amarillo o blanco suelen destacar frente a fondos neutros o escaparates con iluminación cálida. Los mensajes deben ser breves pero impactantes: frases como “-30%”, “OFERTA EXCLUSIVA”, “SOLO HOY” o “DESCUENTO INMEDIATO” funcionan muy bien y pueden leerse incluso desde el otro lado de la calle. La ubicación del vinilo también importa. Colocarlos a la altura de los ojos o en zonas donde naturalmente se dirige la vista mejora su efectividad. Otra táctica útil es alinear los vinilos con los productos que quieres destacar, para que actúen como guía visual. Si el escaparate ya contiene elementos como maniquíes o mobiliario decorativo, es importante que los vinilos no interfieran ni oculten la visibilidad del producto. Usa tamaños proporcionales: vinilos pequeños para artículos pequeños, y algo más grandes solo si el producto destacado lo requiere. También puedes usar tipografías claras y sin ornamentos, que sean fáciles de leer a primera vista. Evita los textos largos, ya que en escaparates pequeños es menos probable que el peatón se detenga a leer con detenimiento. Por último, si el vinilo es removible, puedes cambiarlo fácilmente cada semana con nuevos mensajes para mantener la frescura de la campaña. De este modo, mantendrás el interés del cliente habitual y atraerás nuevas miradas.
Los vinilos removibles de tamaño mediano o pequeño son ideales para escaparates pequeños. Permiten destacar sin bloquear la visibilidad interior y se pueden cambiar fácilmente para adaptarse a diferentes promociones o temporadas.
Los colores como el rojo, el blanco y el amarillo funcionan especialmente bien. Aportan contraste y llaman la atención rápidamente, incluso si el escaparate tiene una iluminación tenue o un fondo oscuro.
La mejor zona es a la altura de los ojos del peatón. También es eficaz colocarlos cerca del producto rebajado para establecer una relación directa entre el mensaje y el artículo que se desea destacar.
Frases cortas y claras como “-50%”, “¡REBAJAS!”, “ÚLTIMOS DÍAS” o “DESCUENTO DIRECTO” generan mayor impacto. La clave es que puedan leerse en menos de dos segundos, incluso desde una distancia considerable.
Sí, siempre que utilices vinilos removibles de buena calidad. Estos pueden retirarse sin dejar residuos y guardarse en condiciones adecuadas para reutilizarlos en futuras campañas como rebajas o liquidaciones.
No sobrecargar el cristal con demasiados mensajes o gráficos. También es importante evitar colores que se pierdan con el fondo del local y utilizar siempre tipografías legibles que se comprendan al instante.